Milton Glaser. Ilustrador. Nueva York, 1929

La palabra “ecléctico” tiene una connotación ligeramente peyorativa, aunque para mí suele ser un signo de que detrás hay una inteligencia inquieta. Al fin y al cabo, hay tanta inspiración en el mundo visual que estaríamos desnutridos si sólo respondiéramos a una parte. Lo que nos impresiona del trabajo de Oscar es tanto su amplitud como su diversidad. Es un arquitecto-urbanista de gran talento y audacia, además de un excelente diseñador industrial cuyos objetos nos convencen de su inevitabilidad: son casi el producto natural de algún proceso orgánico, más que el resultado de una ideología estilística. Su trabajo como interiorista va de lo íntimamente reconfortante a lo monumental. Hay que mencionar también su destreza como dibujante y como pintor naturalista, algo que hoy en día es muy poco habitual en el mundo del diseño. En pocas palabras, es un hombre que parece haberlo observado todo y es capaz de hacer cualquier cosa en el campo del diseño, con rigor y elegancia.