Banco Sofanco, 1988
Producción: Escofet
La producción en piedra artificial a través de un molde daba la posibilidad de usar formas orgánicas, sin apenas más constricciones que la propia resistencia de la pieza. Podía ser una forma anatómica, fluida, poco geométrica, rarísima en el mercado de mobiliario urbano. Es decir, una mezcla entre un sofá de interior y un banco exterior: sofá-banco. Esta pieza forma parte de una colección de mobiliario urbano donde intervinieron destacados arquitectos españoles.