Palacio de Congresos de Segovia, 1999

 

Proyecto no realizado

Localización: Segovia

Autor: Oscar Tusquets Blanca

Colaboradores:

Coordinador: Carles Díaz

Arquitecto: Marcos Roger

Estructura: Jesús Jiménez y Enric Torrent

Superficie proyectada: 4.800 m2

En todos nuestros proyectos procuramos sacar el máximo partido de lo singular del lugar, que el edificio que imaginamos sólo pueda explicarse en aquel emplazamiento y, por lo tanto, resulte irrepetible.
 
Si observamos fotografías aéreas de la zona del actual Teatro Cervantes, ¿que vemos? Vemos un rectángulo en la trama de un bellísimo casco histórico: lo vemos allí, encajonado, casi huérfano de fachada a la calle, pero con un lateral sobre el bello patio que comparte con la espectacular Casa de los Picos. Por el otro lateral, lo vemos apoyado en la impresionante muralla, muralla que se extiende mucho más allá, cruza el legendario acueducto, y se convierte en una de las señas de identidad que singularizan tan bella ciudad.
 
Nuestro proyecto se aprovecha de este singular emplazamiento de tres formas distintas:
 
1)  Aprovecha el patio como una extensión visual de la sala y como fuente de luz tamizada. La sala va a resultar inevitablemente algo angosta, pero si la abrimos al patio con una gran vidriera la haremos mucho más amplia y luminosa. La orientación de esta vidriera es prácticamente Norte por lo que recibiremos la luz matizada y constante del estudio de un pintor. El patio es íntimo y de nuestra propiedad, por lo que no provocará molestias visuales y acústicas a los ocupantes de la sala; incluso puede ser utilizado para actos al aire libre y, naturalmente, como un agradabilísimo espacio de descanso.
 
2) Aprovecha su emplazamiento estratégico haciendo su cubierta visitable. Podemos imaginar el impresionante panorama que desde esta plaza elevada se podrá divisar, desde el centro de la ciudad histórica, hasta la campiña circundante, y la estricta geometría del acueducto cortando el paisaje como un estilete.
 
3) Aprovecha la muralla como un elemento definidor tanto desde fuera como desde dentro. En el actual teatro no somos conscientes en absoluto de que uno de sus laterales está directamente apoyado en la muralla de la ciudad. Es una pena que así sea, por esto proponemos redescubrir este monumental muro, sea por la porción de su exterior que las casas que se le han ido adosando aún deja aparente, sea por toda su cara interior. Así conseguiremos una sala única en el mundo, donde uno de sus laterales es una obra de siglos, en su estado primigéneo, con los grandes bloques pétreos a la vista, su corredor superior y sus almenas.
 
El techo de la sala flota libre sobre la muralla, sin tocarla. Entre ambos se abre una grieta de cristal que permite la entrada de un estrecho rayo de sol durante el día, y durante la noche deja la coronación característica de la muralla a contraluz.
Conseguimos alargar la muralla de Segovia en unos 70 metros y la hacemos llegar hasta una de las puertas de entrada a la antigua ciudad.
 
OTB, 1999